Las relaciones abiertas están cada vez más insertas en nuestra sociedad, teniendo un concepto algo difuminado en general. ¿Qué significa exactamente estar en una relación abierta? Básicamente es dar la posibilidad de estar con otras personas a pesar de tener pareja. Aunque suele ser relacionado exclusivamente con el sexo debemos también tener en cuenta que hay relaciones abiertas que van más allá, realizando actividades con otras personas por el mero hecho de pasarlo bien. Podemos seguir teniendo una vida normal de relación pero la otra persona tendría libertad para relacionarse como quisiera según le apeteciese.
Esta situación debe ser consensuada por ambos miembros en la relación. Estar en una relación abierta porque solo uno quiere estarlo y para no perderle lo aceptamos está abocado al fracaso inevitablemente a medida que pase el tiempo. Nunca podremos estar cómodos en una relación abierta que nosotros no deseábamos. Es algo que debemos tener en todo momento presente a pesar de que los primeros momentos sean buenos porque no podremos evitar sentir dudas a medida que la veamos salir con otras personas, mientras a nosotros puede costarnos mucho el relacionarnos por no dejar de pensar en la relación.
Si somos nosotros los que la buscamos debemos aceptar que perderemos relaciones si nuestra pareja no quiere eso. Debemos elegir si amoldarnos a una forma de relación normal o dejar que la otra persona se marche, comprendiendo que no podremos ser en ningún momento felices en cualquiera de las situaciones si no somos sinceros con nosotros mismos. A su vez es imprescindible que estemos seguros de que queremos realmente una relación abierta. Puede sonar muy bien desde fuera pero vivirla es muy diferente, y más si te consideras una persona celosa y somos nosotros los que decidimos comenzarla. Tomar una decisión precipitada solo viendo las ventajas que tiene hará que acabemos frustrados con la relación y con nosotros mismos.