Las mujeres tienen un gusto muy refinado a la hora de elegir a un hombre, influyendo mucho más que el simple físico. Por supuesto un buen cuerpo siempre ayuda a que se fijen pero es el conjunto, una suma de factores que juntos dan más valor que cada uno por separado. Es fácil hablar con amigas que tengamos y darnos cuenta de frases tan habituales como ‘es guapo pero algo soso’, ‘muy simpático pero normalito de cuerpo’. Eso no significa que si no cumplimos todo no vayamos a poder gustarles: la clave es maximizar lo bueno de cada uno.
Hacer una lista de aspectos concretos sería imposible a la par que inútil, pero sí nos puede servir entender las líneas generales más comunes por las que se rigen:
-Un físico interesante, sin ser lo que defina al hombre: El atractivo físico siempre estará pero no debe ser lo único que pueda ofrecer ese chico; de ser así podría incluso causar rechazo. Valoran más la belleza en el rostro que un cuerpo fornido, y en general no es el factor más importante para valorar a un hombre.
-Simpático, divertido pero que no sea así siempre: Es incontable la cantidad de veces que hemos oído que les gustan los chicos simpáticos. Pues es verdad, pero a su vez hay que evitar excederse de graciosos. Alguien pesado que no para de hacer bromas es repelente para el género femenino.
-Seguro de sí mismo: Uno de los más importantes con diferencia. No hay nada más atrayente que un hombre con las ideas claras, sin miedo a ser él mismo y seguro de lo que hace y dice. Fundamental para gustarle a una mujer.
-Inteligente y dedicado: Estar orgulloso de su pareja es común para ambos géneros, aunque en las mujeres es aún más marcado.